SE ARMO EL CHONGAZO: caso Canal 5

La decisión de la SUNAT de intervenir Panamericana Televisión, al declararse en insolvencia, ha abierto un radical debate a la procedencia de tal medida, que algunos ya vislumbran como una acción del gobierno para tener un canal más de televisión ad portas de iniciarse el proceso electoral del 2011.

El grito en el cielo lo puso anoche la esposa del gerente general de Petrotech, Alberto Varillas Cueto, Rosa María Palacios al denunciar que se trataría de una "expropiación" a una empresa privada por parte del Estado, a través de la SUNAT y hoy esa postura se ve reflejado en algunas portadas de los diarios que apuntan a lo mismo.

Es discutible la decisión? Claro que si es discutible y polémica, pero necesaria por una simple pregunta ¿ SE PERMITIRÁ EL INGRESO DE ERNESTO SHUTZ A SU CANALAZO?, luego de haberse demostrado que puso a Panamericana a los intereses retorcidos del fujomirato ¿ QUE HACEMOS LOS PERUANOS, NOS QUEDAMOS CON LOS BRAZOS CRUZADOS? Entonces repreguntaríamos ¿LA SEÑAL LE PERTENECE A LOS EMPRESARIOS? ¿EL ESTADO QUE HACE EN ESTOS CASOS?

Hace unos momentos se produjo un debate radial, con dos distinguidos abogados Jorge Avendaño, ex decano del Colegio de Lima y César Castiglioni, quien tienen opiniones divididas. Para Avendaño la medida es extraña, pero correcta y que se ajusta a las accione propias de la SUNAT; para Castiglioni eso no es así y por el contrario denuncia una intervención para paralizar las acciones del Poder Judicial.

Sinembargo, nos preguntamos a qué jugan los periodistas? qué intereses están encubriendo con esa posición que busca arrinconar al gobierno.

Acaso quieren que retorne Shutz y después salgan con esos comentarios que digan: ¿El Gobierno no hizo nada para evitar que una gavilla de delincuentes tomen un canal de televisión?

Ya lo dijo hace poco en unas de sus columnas Mirko Lauer: A quien beneficia el empuje del Presidente de la Corte Suprema de Justicia, Javier Villa Stein a Genaro Delgado Parker o a Ernesto Shutz Landázuri? Y en cualquier decisión a favor de uno de los dos mencionados, los televidentes pierden; y pierden porque ambos han demostrado sus bajos instintos para administrar un bien del estado.

Esperemos que calma retorne a los periodistas que através de sus labios y tinta expresan las opiniones de los actuales dueños de la televisión peruana, sino debemos tomar nota de manera de cómo La República y El Comercio se hicieron dueños de América Televisión, con una transacción económica que hasta hoy está llena de clarooscuros.