SE ARMO LA PAMPA, chuponeaban a los calatos

En genuino escándalo se ha convertido el caso de los "Chuponeadores Cholos", al saberse que espiaban al autor de los calatos Alfredo Marcos, amigo personal del Jefe de Estado, Alan García Pérez.

En la edición de la fecha el bitinto diario "La República" da todos los detalles de este caso que nos conducirá a saber quien o quienes manejaron políticamente estos chuponeos, con el propósito de atraer a bajo el gobierno. Muy pronto se sabrá quienes son esos personajes que estuvieron coludidos con un grupo de periodistas que se consideran el sumo del sumo del periodismo peruano.

Es cierto que la opinión pública quedó estupefacta con el espantoso diálogo de Rómulo León Alegría y Alberto Quimper, quienes trataban de enriquecer a costa del Estado, es por ello que en ambos informes de la Comisión "Petroaudios" (tanto de mayoría como de minoria) han encontrado indicios penales en ambos personajes.

Ahora les adjunto la crónica redactada por Miguel Gutiérrez de La República.

Pese al escándalo de “petroaudios”, espías continuaron “chuponeando”
Interceptaron teléfonos fijos de empresa cementera y de Alfredo Marcos. Como si algún poderoso los protegiera, los agentes de la empresa “Business Track” siguieron “pinchando” líneas fijas.

Miguel Gutiérrez R

El equipo especial del Ministerio Público y de la Policía Antidrogas que investiga a una red de espías telefónicos halló una decena de grabaciones de conversaciones interceptadas en la vivienda de uno de los técnicos de la Dirección de Inteligencia de la Marina (Dintemar), que trabajaba paralelamente en la compañía “Business Track” (BTR). La identidad del agente se mantiene en reserva por razones de seguridad.Los audios estaban almacenados en dos dispositivos de almacenamiento portátil (USB).

Las conversaciones, obtenidas mediante el “pinchado” de líneas de teléfono fijo, no están relacionadas con el caso de los “petroaudios”.Esta vez las víctimas del espionaje son dos empresas dedicadas a diferentes rubros. El primer conjunto de grabaciones corresponde al teléfono fijo de la oficina principal en Miraflores de una sociedad dedicada a la comercialización de cemento. Espías a tiempo completo

Los otros audios registran igualmente conversaciones telefónicas mantenidas desde un teléfono perteneciente a la oficina de “Alfredo Editor SRL”, de propiedad del conocido caricaturista político Alfredo Marcos Ortega, quien hasta fines del año pasado ofreció una consultoría a tiempo completo sobre estrategia política comunicacional para Palacio de Gobierno. De acuerdo con la versión ofrecida a las autoridades por el técnico de la Dintemar, la mayor parte de las grabaciones corresponde a los últimos días de diciembre del 2008, lo que indica que los “chuponeadores” prosiguieron con sus actividades ilícitas a pesar del escándalo de los “petroaudios” y las investigaciones del Ministerio Público y del Congreso. Se sentían protegidos. Creían que nunca serían descubiertos.

Interceptaron hasta pocos días antes de que las autoridades intervinieran la empresa “Business Track” (BTR).De acuerdo con la versión de fuentes allegadas a la investigación, quien ordenó “chuponear” los teléfonos de la compañía cementera y de la empresa de Alfredo Marcos fue el propietario de BTR, el contralmirante (r) Elías Ponce Feijóo, el mismo que dispuso espiar los teléfonos del aprista Rómulo León Alegría.

Solo mil dólaresLas autoridades también examinan la información ofrecida por el técnico de la Dintemar Martín Fernández Vírhuez, quien solicitó acogerse a los beneficios de la confesión sincera. El agente en situación de actividad ha manifestado que Elías Ponce lo contrató para efectuar operaciones de interceptación a números telefónicos indicados previamente por el propietario de BTR.Fernández relató a sus interrogadores que recibió US$ 1,000 de BTR por interceptar los teléfonos del aprista Rómulo León Alegría y del ex directivo de Perupetro Alberto Químper Herrera entre febrero y setiembre del 2008.

Señaló igualmente que luego que Elías Ponce le entregó los números para espiar, este a su vez proporcionaba los teléfonos a sus contactos a una empresa “colaboradora” (“service”) de Telefónica para que pincharan las líneas elegidas.Martín Fernández explicó que con parte del dinero que le entregaba Elías Ponce Feijóo pagaba a sus contactos. De acuerdo con su versión, para la realización de las grabaciones de las conversaciones fueron alquiladas viviendas en las cercanías de la casa del objetivo “chuponeado”.

Sin embargo, Martín Fernández, a pesar de haberse acogido a la confesión sincera, afirma desconocer la identidad de los clientes de BTR que pedían el “chuponeo” y luego recibían la transcripción de las grabaciones.Por otra parte, las autoridades a cargo del caso no descartan que la detenida Giselle Giannotti Grados sea investigada por el delito de lavado de activos producto de una actividad ilícita. ¿La razón? La lujosa vivienda donde vivía en la urbanización Las Casuarinas, los 75 viajes al extranjero, especialmente a Estados Unidos, y un llamativo tren de vida.

Sus actividades en BTR aparentemente no justificarían sus signos exteriores de riqueza.En el momento de su captura, a la salida de su casa, llevaba US$ 5 mil en la cartera. Al ser interrogada por la significativa suma y el destino de la misma, Giselle Giannotti manifestó que se iba de fin de semana a una playa en el sur. La posibilidad de que la supuesta experta en temas de seguridad se acoja a la confesión sincera no ha sido descartada por sus abogados.

Como parte de las investigaciones, el fiscal especializado en crimen organizado Walter Milla reiteró el pedido al juez Edwin Yalico Contreras para que autorice el levantamiento del secreto de las comunicaciones de los seis detenidos de la empresa “Business Track”. El objetivo es analizar el contenido de los discos duros, memorias de los teléfonos y la documentación escrita que se les incautó a los implicados. En una anterior ocasión, inexplicablemente, el magistrado Yalico declaró improcedente la solicitud del fiscal Milla.claves

Relación.

Giselle Giannotti Grados tuvo una relación con el capitán de navío en retiro Wilson Gómez Barrios, gerente general de “Forza” y compañero de promoción de Sergio Giannotti Grados, hermano de Gigi.Plazo. El tiempo para las investigaciones preliminares se vence el próximo sábado, al término de las cuales el fiscal especializado deberá denunciar a los miembros de la organización dedicada al espionaje.

Giampietri da explicaciones

Ante la evidencia de que el propietario y principal directivo de “Business Track (BTR), contralmirante (r) Elías Ponce Feijóo, controlaba una suerte de servicio de inteligencia privado, y que este mantenía una estrecha amistad con el primer vicepresidente, contralmirante (r) Luis Giampietri Rojas, este informó en detalle al presidente Alan García sobre la naturaleza de su relación con Ponce, a quien se atribuye encabezar una red de espionaje telefónico con efectivos y equipos de la Dirección de Inteligencia de la Marina (Dintemar).De acuerdo con fuentes del Ejecutivo, Giampietri admitió que Ponce era un amigo de confianza y que a veces le encargó algunos trabajos no remunerados.

El primer vicepresidente reiteró, además, que no estaba al tanto de las actividades de espionaje de Elías Ponce.Giampietri también conversó con el primer ministro, Yehude Simon, y con algunos congresistas de la bancada del APRA, con la misma finalidad de deslindar respecto a su relación amical con Ponce, a quien promovió como jefe de la Dirección Nacional de Inteligencia (DINI).

“Gigi” estuvo como en su casa

Asistentes a una conferencia privada que ofreció la ejecutiva de “Business Track” Giselle Giannotti Grados confirmaron que la exposición se produjo en la vivienda de Ántero Flores Aráoz, antes de que sea designado ministro de Defensa. Las fuentes indicaron que habló sobre la infiltración chavista mediante las Casas de Alba y organizaciones radicales de izquierda, algunas relacionadas con elementos que pertenecieron al Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA) y a la Coordinadora Continental Bolivariana (CCB).Giselle Giannotti, conocida familiarmente como Gigi, tuvo como auditorio a un grupo de empresarios y políticos. El objetivo de la presentación era alertar de la creciente infiltración chavista en los movimientos populares